Si sois fans de la cosmética natural y además sois viajeras, seguro que ya conocíais Sabon.
Cremas, perfumes, aceites, fragancias, velas, creados con esencias extraídas de aceites aromáticos y sales minerales del Mar Muerto, que han viajado desde Tel Aviv. donde nació la marca, a Francia, Italia, USA, Canadá...
¡La buena noticia es que han abierto en Madrid (Calle Ayala 25)!
La mala es que cuando entréis os lo vais a querer comprar todo.
El otro día en una sesión de niñas aprovechamos para cotillear en profundidad todo lo que tienen en la tienda. Empezamos eligiendo una fragancia, y con ella el jabón, el exfoliante y la crema de manos que combinaban entre ellas.
Después de unos minutos en su fuente probando el tratamiento, pensaba que me habían cambiado las manos. Amigas, 100% amor cosmético.
Durante esta semana he probado además el contorno de ojos, que se ha posicionado entre mis favoritos, (ya hablaremos un día en profundidad de contornos, que les tengo ganas) y la crema de pies, que hidrata muchísimo y viene muy bien ahora que empezamos a lucir sandalia.
Además la estética de la tienda está tan cuidada que dan ganas de llevarte todos los botecitos, las lámparas, los espejos.
El precio no es barato, entendiendo barato precio marca blanca de supermercado. Pero no es tan caro como otras marcas importantes que son menos efectivas. No os recito precios, tenéis todo en su web Sabon.es
Otra cosa que me ha encantado son las texturas, desde crema, manteca, gel, sorbete o aceites, que cada una somos un mundo en el tema absorción -textura.
Y los olores, que nos inspiraron, entre otras paridas varias, la India, el campo, el coco adolescente, el verano.
Por cierto, también tienen productos de caballero, y una colección mamá -bebe tan cuqui que no he encontrado otra palabra para definirlo.
Así que ya sabéis, tenéis otro punto de visita obligatorio en vuestras compras beauty.
Os dejo algunas fotos y le damos las gracias a Tanit, que nos explicó todo muy requetebien :)
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