Amigos, si año tras año tenéis que incluir los mismos propósitos en vuestra lista, es que algo se está haciendo mal.
He descartado el gimnasio, he interiorizado el aprender inglés desde hace un buen rato, y asumido que de momento paso olímpicamente de intentar dejar de fumar. No pasa nada, los propósitos pueden reiniciarse cualquier día de vuestra vida, no os martiricéis repasándolos.
Así que me he hecho una casi-ni-lista práctica, llena de cosas insignificantes pero que siempre se me resisten, y que son las que me convierten en un pequeño caos doméstico. Se hace saber que este 2014:
- Voy a conseguir apuntar la lectura del gas y del agua el día que corresponde, se acabaron las lecturas estimadas. Hoy tocaba y he cumplido.
- Voy a levantarme cinco minutos antes. Y aquí amigos, mi talón de Aquiles. Ni viajes, ni citas, ni tres despertadores sincronizados. Mi cerebro no responde por las mañanas. Es incapaz de asumir que hay que levantarse cuando suena el despertador. Cinco minutos, los justos y necesarios para que no se desencadene el caos mañanero de desayunar, peinarme y pintarme en el tren, y llegar siempre tarde y acelerada.
- Voy a terminar los cursos online que compré y nunca terminé. (Entre este y el del despertador tengo hasta 2016)
- Voy a decorar el marco de mi salón. Más de cinco meses colgado sin una triste foto.
Y esto es a lo que voy a dedicar mis esfuerzos diarios cotidianos. Puede que haya otros grandes propósitos, pero esos son de los que no se cuentan :) ¿Cuáles son los vuestros?
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